Soy un humanista y el ser humano es un misterio que me ha fascinado siempre y siempre ha estado en el centro de mi obra. Dibujé cuatro años en la Escuela de Artes y Oficios de Vitoria, en modelo vivo o del natural, masculino y femenino.
Esas bases de las clases de Rafael Lafuente, un prestigioso maestro pintor vanguardista, constituyen los cimientos de mi construcción como pintor de la gura humana.
Estamos en un espacio propio, con unas soluciones pictóricas espaciales que me permiten una gran libertad a la hora de componer los cuadros. Es una ruptura con la perspectiva lineal renacentista y aérea. Los relatos o los elementos configuradores se entrelazan a diversos niveles pero se conforman como relatos múltiples, conformando una pluralidad iconográfica de diversos niveles, creo que se muestran con la libertad de los sueños, con una configuración espacial similar. Esta expresión plástica rompe también con la unicidad del relato, con la lógica del mismo. Es una pintura de pluri dimensionalidad narrativa y espacial. Surrealismo Multidimensional, esta definición engloba todos los aspectos antes señalados.